Como expertos en el cuidado de ancianos en Madrid sabemos que hay un segmento de la población con especiales dificultades para el acceso y uso de las tecnologías digitales. Esto provoca que no puedan aprovechar los beneficios de la digitalización. Hablamos de las personas de la tercera edad.
Según datos de Eurostat, casi la mitad de las personas entre 65 y 74 años que utilizan Internet disponen de habilidades digitales bajas. Es innegable que hay una brecha digital en España que les afecta sobre todo a ellos. Vamos a ver más sobre el tema.
En las personas mayores de 65 años, las habilidades para aprovechar las oportunidades de la transformación digital son más bajas que las de los colectivos más jóvenes. La brecha digital es por lo tanto una cuestión generacional. Las personas mayores con escasos conocimientos digitales son más vulnerables a los fraudes cometidos a través de Internet. Durante el confinamiento derivado de la pandemia de COVID, los hackers se aprovecharon de la hiperconectividad de los usuarios y la vulnerabilidad de algunos colectivos.
Cómo superar la brecha digital
Podemos hablar de una doble brecha referida a las tecnologías digitales en la que las personas mayores de 65 años son las principales afectadas. No solo es clave tener en cuenta el uso de estas tecnologías sino también las capacidades de las personas para que este uso sea el adecuado.
El uso de tecnologías digitales es notablemente superior entre la población más joven. También existe una brecha en las habilidades digitales entre los usuarios de Internet. Según Eurostat, mientras que el 68% de los jóvenes de entre 16 y 24 años cuenta con habilidades avanzadas, solo el 6,5% de los mayores de 65 años tiene estas destrezas. De hecho, casi la mitad de las personas entre 65 y 74 años que utilizan Internet cuentan con habilidades digitales bajas.
La mayoría de jóvenes se mueve en una generación hiperconectada. No se puede decir lo mismo de sus mayores. La crisis del coronavirus ha hecho que los mayores, para adaptarse a la situación, se esforzasen por reforzar su digitalización para poder seguir en contacto con sus seres queridos, por ejemplo a través de las apps de mensajería o las videollamadas.
Proteger a los mayores de los ciberataques
En este contexto, las personas mayores son objetivo de los hackers y sus ciberataques. Aumentan por lo tanto los riesgos para este colectivo. Según el INE, sólo aproximadamente la mitad de las personas entre 65 y 74 años que usaron internet en el último año, tienen algún tipo de software o herramienta de seguridad informática en sus dispositivos. Es más común que los más jóvenes cuenten con algún tipo de ciberseguridad.
El apoyo intergeneracional es fundamental. Es necesaria una actitud de escucha y empatía para entender sus dificultades en el manejo de las nuevas tecnologías. Los cuidadores de Servisalud pueden ser también un soporte de ayuda y formación en nuevas tecnologías para que los mayores tengan una mejor conectividad con sus familiares y amigos. De esta manera será más fácil evitar el aislamiento social y hacerles más independientes en el mundo tecnológico.
De hecho, los nuevos dispositivos móviles disponen de sistemas de accesibilidad especiales para personas mayores y para quien tenga algún tipo de diversidad funcional. Por ejemplo, opciones para ampliar la pantalla, hacer contrastes más pronunciados en los textos, personalizar los teclados o hacer que los textos sean leídos de forma autónoma.
Por otro lado, es fundamental que se sigan desarrollando programas de formación en nuevas tecnologías para los mayores desde las instituciones, centros de mayores y asociaciones.
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